martes, 26 de julio de 2011

Familia


El artículo 42 de nuestra Constitución Política establece que “La familia es el núcleo fundamental de la sociedad. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla”.

En estos días, con ocasión del eventual fallo de la Corte Constitucional sobre la prohibición histórica del matrimonio entre parejas del mismo sexo se ha discutido mucho sobre lo que es una familia. Pero hasta el momento no he visto una concepción coherente y convincente. A continuación planteo algunas preguntas 1. ¿Es realmente una familia la que conforman un hombre, una mujer y sus hijos? 2. ¿Es una familia la que conforman una madre y uno o más hijos? 3. ¿Es una familia la que conforman un hombre y una mujer que no tienen hijos? 4.¿Son familia, un padre y su hijo o hija? 5. ¿Es una familia un grupo de hermanos que no cuentan ya con la presencia de sus padres? ¿Son familia las familias no occidentales  y las que están presentes en nuestro territorio desde antaño en el que la figura tradicional está desdibujada? Un examen breve de las preguntas 2, 3, 4, 5 y 6 muestra cómo la familia es una institución definida por la sociedad, y por tanto tiene un fuerte asidero histórico, al punto que la palabra “familia” se ha empezado a usar como un mecanismo de cohesión social y para ello basta observar cómo en las redes sociales pueden conformarse familias con la sola intención de agrupar a determinadas personas como hermanos o primos e inclusive padres sin necesidad de demostrar vínculos mayores al afecto. Otros escenarios previos a las redes sociales ya permitían el uso de “familia” para expresar un grado alto de afecto al encajar adecuadamente en un determinado grupo social. “Son como mi familia” se solía decir.

Ahora bien, hay que hacer con estos elementos una consideración de otra índole. Cuando tratamos de definir algo solemos hacerlo de dos maneras. Una que llamamos extensiva y otra que suele llamarse intensiva. La primera manera consiste en hacernos un concepto a partir de la enumeración de los ejemplos a los que tenemos acceso, así  por ejemplo, nos hacemos a un concepto de número al observar el 1, el 2, el 3, etc. Del mismo modo nos hacemos un concepto de familia al observar las que están al interior de las preguntas 2, 3, 4 y 5. Pero así como al observar todos los números naturales, ello no nos da una adecuada definición del número, tampoco podemos hacernos una adecuada definición de lo que es una familia al observar las familias actualmente existentes o las que están reguladas en la ley. Me arriesgo a sugerir que ninguna institución es eterna y que, por tanto, en su interior hay cambios o nuevos arreglos en el consenso traslapado que le subyace, con el transcurrir del tiempo. Colombia requiere una definición intensiva de familia, y creo que la tiene en el mismo artículo que se usa para argumentar contra las familias diversas. Muy pocos negarán lo siguiente: “La familia es el núcleo fundamental de la sociedad. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla”.  Dicha reformulación deja entrever tres orígenes excluyentes: 1. los vínculos naturales, 2. el matrimonio, y 3. la voluntad responsable. Cualquiera de los tres, toda vez que la aparición del siguiente no implica la desaparición del precedente, nos informa del tipo de sociedad que se avecina y que los constituyentes tímidamente se atrevieron a anticipar. Además sugieren un orden cronológico. Podemos suponer en gracia de discusión que nos encontremos en la etapa en la que las familias se construyen a partir del matrimonio, y que es deseable que también se formen a partir de la voluntad responsable.   

El término familia tiene un origen etimológico poco afortunado. Viene del latin famulus y éste significa esclavo o grupo de esclavos. Pero podemos pensar que de alguna manera la familia es una institución justa. Paulatinamente el Estado y su poder coercitivo han venido interviniendo en un espacio que hasta hace poco era considerado como privado. El conflicto entre las esferas pública y privada del ser humano se ha librado principalmente en este escenario llamado familia. La construcción de la privacidad y la construcción de la vida pública se originan en este mismo lugar. Por eso el problema con las doctrinas comprensivas, expresadas por las iglesias cristianas, las cuales no ven más familia que las réplicas de la sagrada familia. Si la familia es realmente el núcleo de la sociedad, como dice la Constitución, puede que un cambio en el núcleo cambie la sociedad. ¿Y qué se ha buscado en Colombia desde hace décadas, más que un cambio en su sociedad?    
           

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